lunes, febrero 20, 2006

Membretes

"El escritor se organiza en su texto como lo hace en su propia casa. Igual que con sus papeles, libros, lápices, carpetas, que lleva de un cuarto a otro produciendo cierto desorden, de ese mismo modo se conduce en sus pensamientos. Para él vienen a ser como muebles en los que se acomoda, a gusto o a disgusto. Los acaricia con delicadeza, se sirve de ellos, los revuelve, los cambia de sitio, los deshace. Quien ya no tiene ninguna patria halla en el escribir su lugar de residencia.
Y en él produce, inevitablemente, como a su tiempo la familia, deshechos y amontonamientos. Pero ya no dispone de desván y le es sobremanera difícil desprenderse de la escoria. De modo que al tener que estar quitándosela de adelante, corre el riesgo de acabar llenando sus páginas de ella"

Theodor W. Adorno.
Mínima moralia

Etiquetas:


Esto no es todo, amigos

sábado, febrero 18, 2006

Radio Word Remix

Hay tanto que quiero contarte,
hay tanto que quiero saber de tí
Ya podemos empezar poco a poco
cuéntame qué te trae por aquí.

No te asustes de decirme la verdad
(eso nunca pude estar así tan mal)
yo también tengo secretos para darte
y que sepas que ya no me sirven más

Hay tantos caminos por andar...

dime si tú quisieras andar conmigo
cuéntame si quisieras andar conmigo

Estoy ansiosa por soltarlo todo
desde el principio hasta llegar al día de hoy
Una historia tengo en mí para entregarte,
una historia todavía sin final

Podríamos decirnos cualquier cosa,
incluso decirnos para siempre un siempre no,
pero ahora, frente a frente aquí sentados
festejemos que la vida nos cruzó.

Julieta Venegas

Etiquetas:


Esto no es todo, amigos

viernes, febrero 17, 2006

Membretes

Lo que nosotros vemos de las cosas son las cosas.
¿Porqué veríamos nosotros una cosa si hubiese otra?
¿Porqué ver y oír sería engañarnos si ver y oír son ver y oír?
Lo esencial es saber ver,
saber ver sin pensar,
saber ver cuando se ve,
y ni pensar cuando se ve,
ni ver cuando se piensa.

Alberto Caeiro (frag.)

Etiquetas:


Esto no es todo, amigos

miércoles, febrero 15, 2006

Dobles

Ella me cuenta que pasó todo el sábado haciendo el aseo de la casa. En la noche, sentada frente al teclado, escribe una historia sobre los dobles. A la mañana siguiente, en forma fortuita, de puro aburrida, se busca a sí misma en la red, y descubre que hay otra ella, en otro país de otro hemisferio. Y que esa otra, que tiene su mismo nombre, también hizo ese sábado jornada de limpieza en la casa.

A raíz de este episodio, me cita a Borges: "que la historia hubiera copiado a la historia, ya es suficientemente pasmoso, que la historia copie a la literatura es inconcebible..."

No le dije que ese sábado, yo mismo, cansado de hacer el aseo, me senté a escribir una historia sobre ella.
Una historia en la que ella no era ella, sino
otra. Quiero decir: la misma, su mismo nombre, pero a muchas millas de distancia.

En esa geografía, que ciertamente no conozco aunque puedo imaginar, ella se sentaba en un sofá, cerca del fuego, y leía a Borges, a medias entre su cuento y mi cuento, hasta dormirse.

El libro, al caer de sus manos, quedaba abierto en esa página, donde un subrayado en azul resaltaba unas pocas palabras, exactamente las que suponen.


Esto no es todo, amigos

martes, febrero 14, 2006

Agua

Cuando ella me dice: "voy a nadar", siento su placer.

Que es otro de aquel al que me tiene acostumbrado, pero me excita de igual manera, y también es mío, aunque tal vez nunca lo sepa.

En ese momento, quisiera ser el agua de ese mar en el que, en un rato apenas, ella se desprende de todo lo que existe en su mundo, para ser sólo la conciencia de su cuerpo.

Quizás sólo yo entienda que en ese momento, ella y el agua son la misma materia. (Por eso mismo pienso que es mi única oportunidad de fundirme con ella)

No estoy seguro, pero casi podría asegurar que es feliz. En ese momento en que ella y el agua, o sea yo, somos uno.

Detesto paparruchadas poéticas del estilo de: El agua te roza. El agua te envuelve. El agua te acaricia.

Cualquiera sabe que el agua, ni más ni menos, te absorbe y pugna, contra tus fuerzas, por llevarte dentro de sí.

Creo que ya lo dije, pero quisiera ser agua.

El agua de ese mar donde ella se dispone a nadar.

Etiquetas:


Esto no es todo, amigos

martes, febrero 07, 2006

Loop # 6

- Creo que, de ahora en más, lo mejor es mantener el silencio.
- Claro, es lo mejor.
- ...
- ...
- ...
- ...
- ¿Amor?
- ...
- ¿Estás ahí?
- ...
- ...
- ...
- Decime algo...
- ...
- ...Por favor.

Etiquetas:


Esto no es todo, amigos

sábado, febrero 04, 2006

Membretes

...No, únicamente el cielo, si a eso se lo podía llamar cielo, estaba en condiciones de ayudarlo: no se trataba, en absoluto, de camuflar la realidad, sino de cumplir un milagro, de hacer que no hubiera tenido lugar lo que había ocurrido. Borrar ese episodio de sus vidas y también borrar sus consecuencias, pero asimismo, borrar el rastro de la goma de borrar y el rastro de ese rastro. No se trataba de camuflar o de olvidar, sino de no tener nada que camuflar ni que olvidar, ya que, de otra manera, el recuerdo volvería e, ineludiblemente, los destruiría.

(Frag. de "El Bigote", de Emmanuel Carrére)

Etiquetas:


Esto no es todo, amigos

viernes, febrero 03, 2006

Loop # 5

- Hola, amor...¿sabés qué día es hoy?
- Jueves, mi amor.
- Ya sé, querido, pero ¿qué fecha?
- Dos de febrero, creo...¿por?
- Bueno...porque hoy hace un año y tres meses que salimos.
- ¿Y vos creés que falta mucho para llegar?

Etiquetas:


Esto no es todo, amigos

Correspondencia privada # 0 Pienso mucho en tí


Una chica, con la que intimé un cierto tiempo, tenía la curiosa costumbre de enviarme cartas casi a diario. si dije "cartas", es fácil deducir cuánto hace de esto...

Todas, invariablemente, en distintos formatos y con diferentes caligrafías que me permitían adivinar sus estados de ánimo, decían una sóla cosa. "Pienso mucho en tí".

Cuando se me empezaron a retorcer las extremidades y mi piel se puso viscosa, un amigo en común -que luego supe había sufrido los mismos síntomas-, me abrió los ojos aunque ya era demasiado tarde.

La tipa era una bruja que solía juguetear con alfileres sobre el cuerpo de peluche de cada uno de sus ex-amantes.

Etiquetas:


Esto no es todo, amigos

jueves, febrero 02, 2006

Radio Imaginaria #34. Tango

- ¿Le sirvo otra copa, Maestro?
- Gracias, Antonio, pero son las 9.00 de la mañana y no suelo beber a estas horas.
- No me refería a Usted...sino al caballero de la mesa del fondo.
- ¿Otro Maestro?
- Jerrga profesional.
- Mmmm...desde ayer está bebiendo, ¿no?
- Así es. Por lo que me dijo es un escritor en desgracia...un tal S., ¿le suena?
- Suena a poco...a poco conocido, digo. ¿Y cuál es su pena?
- La mía, la distancia...¿y la suya?
- Preguntaba por la del escritor en desgracia...
- Claro, claro. No sé...mencionó algo acerca de un concurso y de unas vacaciones en suspenso, pero para mí que tiene el alma herida.
- "Tres cosas lleva el alma herida"...
- ¿Salud, dinero y amor?
- Esas tres más bien le faltan...
- ¿Sexo, droga y rock and roll?
- Antonio!...estaba cantando un tango, simplemente.
- Eso es, Maestro. Para mí que el tipo se está preparando para escribir un tango.
- Sírvale una copa más, entonces. Y déjelo sólo.

Etiquetas:


Esto no es todo, amigos

miércoles, febrero 01, 2006

Conversaciones con mi Editor. Ocho

Me desperté sobresaltado con el sonido punzante del teléfono junto a mi oreja. Punzo-cortante, para ser más exacto, ya que al cuarto llamado y antes de activarse el contestador, se interrumpía unos segundos para volver a iniciar la serie.
Titubeando entre retener los retazos de un extraño sueño protagonizado por duendecillos de peinado afro y bigote tupido, vestidos con impermeables blancos, y abrir un ojo para entender el dónde y el cuándo de la penumbra que me rodeaba, giré mentalmente un cuarto de vuelta la lente, y todo volvió a enfocarse.

Recordé que esperaba esa llamada.

- Hola...-dije, sin mucha convicción.
- ¿Le parecen horas para estar durmiendo, S.?

Rimoldi, una vez más, parecía haberse sentado en su sillón favorito: frente al tablero de Control de Monitoreo Telepático de Voluntades de sus empleados.

- Cómo le va. Lo estaba buscando.
- Y lo tuve que encontrar yo a Usted... ¿se da cuenta lo que quiero significar cuando insisto en que si no pone empeño no va a conseguir nada?
- Necesitaba hablarle - dije, eludiendo diestramente los obstáculos que había comenzado a interponer en nuestro diálogo.
- Imposible -respondió-. Me voy a Brasil dentro de media hora.
- ¿A Brasil?
- Sí. A Barbarita le agarró el antojo de ver el carnaval de Río y ya sabe cómo son las mujeres...
- ¿Barbarita? ¿Río? ¿Yo? ¿Mujeres?
- ¿Qué le pasa, S., está redactando un telegrama, me está tomando el pelo o está sordo?

Por fin salía a relucir el peor Rimoldi, el de las tres preguntas en una, pensé.

- Nada, nada -mentí, recomponiendo la voz.
- Mejor así -mintió a su vez.

Era obvio que cuando más me necesitaba era cuando me pasaba algo. Siguió hablando.

- Antes de irme quería encargarle algo. Ese concurso del barquito...
- Pero son 150 carillas para marzo, Rimoldi...-sabía que se trataba de una causa perdida y traté sutilmente de hacerle notar que estaba cometiendo una tontería.
- Exacto. Me conformo con 120. Unas tres y fracción por día, empezando hoy mismo. Nuestro equipo de correctores me asegura que agregándole un par de pavadas se pueden llevar sin problemas a 150.
- Pero...
- Y la temática, S., le pediría que no cometa estupideces como es su costumbre, recuerde que es una novela para pre-adolescentes. ¿Está claro?
- ...
- ¿Está ahí? -se impacientó.
- Eee..estoy. Escúcheme, Rimoldi, en realidad lo estaba buscando para pedirle unos pesos...pensaba tomarme unos días de vacaciones, ¿sabe?, no sé si...
-¡Doce lucas! - gritó, totalmente fuera de sí- ¡Eso es plata y no unos míseros pesos, ¿me entiende?!!...¿Porqué no se gana ese premio en vez de andar mendigando unas monedas?
- Es que yo pensaba...
- Se va mi avión. Póngase a escribir más y piense menos, S. Hasta la vuelta y buenas vacaciones.

Cortó antes que le dijera "gracias".

Pues bien, dadas las circunstancias, había una sóla cosa por hacer. Tomé mi libreta, mi lapicera y me fui para el Bar, dejándome mojar lentamente por la llovizna tibia de febrero.

Etiquetas:


Esto no es todo, amigos

Locas vacaciones

No sé lo que se imaginan.

Pero en esta oportunidad me refiero a las que estoy pasando con mis hijas.

(Una suerte de filioterapia, según me dijeron)

Recordé la vieja técnica de teñir remeras con nudos, me lucí haciendo pulseritas de mostacilla (no en vano pasé años vendiéndolas en Gesell), escuchamos a Elvis, la nueva pasión de mi más pequeña, a los Who y a Lennnon. Y de a poco, le voy enseñando a bailar el rock and roll.

Nos vimos todos los estrenos y ya, de puro aburridos, nos alquilamos el Submarino Amarillo.

Compramos pintura, pinceles, papeles, cola, y con otro tanto lo que había en la casa convertimos toda superficie horizontal en mesa de taller.

La mayor suele pasar horas chateando con sus amigas, aunque supongo que eso significa que tiene un novio. Todavía no lo conozco, si es lo que quieren saber. Pero que lo tiene, lo tiene.

Y en los ratos que se cansa de chatear (que son los menos, pero deben coincidir con los momentos en que el tipo en cuestión se va al baño o a cenar o a dormir), le digo que tome el saxo - que deben saberlo, lo toca mucho mejor que yo- y conmigo en la viola, zapamos algo hasta que los vecinos patean el cielorraso.

Entonces, los tres, mis dos hijas y yo, nos miramos y nos sonreímos con una estudiada complicidad.

Sabemos que es hora de cruzarse a la plaza y sentarse en el pasto para hablar de cualquier cosa hasta que amanezca.

Esto no es todo, amigos